10 de febrero de 2013

Juana Barrantes Enriquez, la profesora de la Hacienda San Agustín

Escrito por Elizabeth Lino Cornejo, publicado el suplemento Dominical de El Comercio  el domingo 30 de agosto de 2009



“Yo viviendo en el Callao no sabía que existía. A mi papá lo oía mentar la hacienda San Agustín, Bocanegra, Oquendo, todos esos sitios. Lo oía mentar pero no tenía idea de donde quedaba. Y después quien iba a pensar que iba a venir aquí, me iba a anclar acá y aquí me quedé”.



La Srta. Juanita 

Juana Barrantes Enríquez llegó a la Hacienda San Agustín en abril de 1941 cuando tenía 26 años, era una época difícil, “Con la cuestión de Leguía no había trabajo, no se conseguía en ningún sitio y los años pasaban”. Siempre quiso ser profesora, desde entonces su vocación de maestra la llevó a educar a cinco generaciones en el lugar. Los mayores la recuerdan con respeto y admiración por su don de maestra comprometida, seria y abnegada. Los más pequeños tejen historias en torno a ella y la antigua casa hacienda, donde vivió hasta sus últimos días. La señorita Juanita, como la conocían en San Agustín, murió en abril del 2008, cerrando un ciclo misterioso de llegada y partida.

Juana Barrantes se fue sin que sus gastados ojos vieran materializarse aquello que hasta el cansancio había oído desde sus años mozos: la ampliación del aeropuerto. Había vivido la época de la llegada de éste, sabía que crecería aun más y que ella y todos los pobladores tendrían que marcharse algún día, pero ¿Cuándo? 

Casi toda mi vida la he pasado acá 

Juanita vivía en una casa vieja y grande, la que en su momento fuera la casa de Manuel Prado. Los niños decían que ella lo sabía todo. Que guardaba en un gran libro los secretos y la historia desde todos los tiempos. Bordeaba entonces los setenta años y tenía los muebles de la casa cubiertos con plástico grueso y amarillento. Cruzar la puerta de su casa era traspasar los muros del tiempo, llenarse de historias y nostalgias.

Le gustaban las conversaciones y como buena maestra sus historias eran muy bien narradas, pensando siempre en el oyente. Solía hablar de ella y su larga vida de maestra dedicada a generaciones de niños que se hicieron hombres. De los hijos de los japoneses a quienes preparaba para la comunión, de sus hermanas Dora y Julia que también fueron profesoras en San Agustín, de la casa hacienda, de los tiempos pasados y de su vida en de niña en la Oroya y sus viajes en tren.

Siempre delgada, siempre pulcra, con sus tacones altos y sus piernas delgadas. Traje de sastre, labios pintados, manos huesudas y humo de cigarrillo expandido en la casa. Los altos tacos de sus zapatos hacían rechinar las maderas de la vieja casona, apagando de cuando en vez la voz del locutor de la radio encendida en la cocina, donde cada domingo junto a su hermana Dora oía la misa dominical.

Detrás del aeropuerto 

La ex Hacienda San Agustín está ubicada en el kilómetro 3.6 de la carretera Gambeta, a espaldas del aeropuerto internacional Jorge Chávez, en el Callao. Estos terrenos, que son campos de cultivo, están destinados a desaparecer para dar paso a la ejecución del plan de “modernización” del consorcio norteamericano-alemán: Lima Airport Partners (LAP). El año 2001 dicho consorcio recibió del Estado Peruano la adjudicación del contrato de concesión por 30 años para la ampliación del mencionado aeropuerto. El Ministerio de Transportes y Comunicaciones a nombre del Estado, entregará a LAP, de acuerdo al contrato de concesión, 650 hectáreas colindantes al aeropuerto Jorge Chávez.

Cuando uno sobrevuela este espacio (que es la única forma de verlo en toda su magnitud) no se imagina que allí abajo entre el verdor de las chacras y al borde de la larga carretera Gambeta, hay una población de 400 familias que esperan noticias sobre su reubicación. Pobladores que desde los inicios de la construcción del aeropuerto y su posible ampliación en años venideros, adquirieron la denominación de erradicables, por lo cual nunca se les otorgó un título de propiedad.

Se dice que el “lento avance” del cumplimiento de los acuerdos se debe a que el mayor “obstáculo” ha sido la materialización de la expropiación de tierras. Dicho proyecto de modernización además de contemplar la construcción de una pista de aterrizaje de las mismas dimensiones a la actual, planea construir un nuevo complejo del terminal, un centro comercial, un complejo de carga aérea y actividades industriales.

 Pero detrás de aquello a lo que se llama “obstáculo”, ante tanto ofrecimiento con tamañas palabras sobre lo que será aquel complejo, no se encuentra sino la incapacidad del Estado de cumplir con lo que se debería en primer término: las personas que habitan este espacio y el respeto de sus derechos a una vivienda digna y el pago justo de sus tierras.

La expropiación de la zona agrícola, de la cual son dueños un buen grupo de pobladores, no contempla el pago de un precio que justifique la venta de sus tierras y con ellas toda una vida dedicada al trabajo en las chacras. El otro lado del “obstáculo” es la falta de responsabilidad con la población que habita este espacio: el Asentamiento Humano El Ayllu. La población de El Ayllu ocupa dicho espacio desde mucho antes que el aeropuerto llegara, no son invasores, son familias que trabajaban desde cuando San Agustín era una hacienda en gran apogeo, en pleno valle de Bocanegra, conjuntamente con las que ya desaparecieron para dar paso a centros urbanos como Sarita Colonia. El Estado tiene a la población sumergida en la incertidumbre, a esperas de saber a donde serán reubicadas las 1700 personas del lugar. Sin una fecha exacta de salida, sin un lugar con viviendas dignas para ser habitadas, ni un plan tan claro como sí parece ser el aquel denominado “plan de modernización”. Que no sorprenda si uno de estos días comenzamos a ver en la televisión grupos policiales o grandes maquinarias forzando a salir de este lugar a quienes seguramente llamaran invasores que se oponen al desarrollo del país.

1 de febrero de 2013

Colectivo Salvemos Lima pide conservación de Casa Hacienda San Agustín

Bajo la iniciativa del Colectivo Salvemos Lima, colectivo que promueve la conservación y uso adecuado del patrimonio, se está circulando una carta dirigida a los ministros de Cultura, Luis Peirano Falconí y de Transportes y Comunicaciones Carlos Paredes Rodriguez solicitando al conservación de lo que fuera la Casa Hacienda san Agustín. La Casa que fue propiedad de la familia Prado estaba ubicada entre las chacras del Valle Bocanegra, y en la parte central de lo que fuera El Asentamiento Humano El Ayllu.


Si bien la población de "El Ayllu" ya ha sido trasladad, las viviendas demolidas y las chacras convertidas en polvo, se ha logrado detener la demolición de la Casa Hacienda que estaba programada para el día miércoles 30 de enero. Con la política de "modernización y desarrollo" que se vive en el país, quien sabe que es lo que se pueda lograr, en todo caso, no hay peor trámite que el que no se hace.

Pueden adherirse al petitorio de la carta desde la cuenta de facebook del Colectivo Salvemos Lima AQUI o escribiendo al correo:
salvemoslima@live.com

Lima, 30 de enero de 2013

Señor LUIS PEIRANO FALCONÍ
Ministro de Cultura

Señor CARLOS PAREDES RODRÍGUEZ
Ministro de Transportes y Comunicaciones

Los abajo firmantes, ciudadanos identificados con la protección y difusión del patrimonio cultural de Lima, queremos expresar nuestra preocupación por la situación de la Casa Hacienda San Agustín, importante ejemplo de arquitectura del siglo XIX, cuya demolición ha sido anunciada, para dar paso a las nuevas pistas del Aeropuerto Jorge Chávez. La Casa Hacienda se encuentra dentro del asentamiento humano El Ayllu, que el Ministerio de Transportes y Telecomunicaciones ha expropiado para la ampliación del aeropuerto.

Consideramos que se debe evitar la destrucción de la Casa Hacienda, dado su evidente valor histórico y cultural: la hacienda San Agustín se remonta a finales del siglo XVII cuando la orden agustina elige el valle de Bocanegra, Callao, para erigir su hacienda conventual. Durante la República pasó a manos de la familia Prado y luego de la Reforma Agraria fue entregada a campesinos predominantemente de origen nikkei.

Sabemos que hace varios años el Instituto Nacional de Cultura decidió no declarar Patrimonio Cultural de la Nación a la Casa Hacienda, al parecer que debido a algunas alteraciones que ha sufrido en las últimas décadas, especialmente cuando funcionó temporalmente como escuela para los hijos de los campesinos, pero consideramos que las modificaciones no han desnaturalizado la estructura de este inmueble histórico. Por otro lado, ninguna carta internacional de conservación de inmuebles dispone que para proteger un monumento, éste se haya mantenido intacto. Por el contrario, las cartas defienden y protegen la evolución histórica y artística del patrimonio.

Sabiendo que las obras de ampliación del aeropuerto deben proseguir, proponemos, señores Ministros, que en el caso no pueda mantenerse en el mismo lugar, la Casa Hacienda San Agustín sea trasladada a otro lugar y sea convertida en museo.

24 de enero de 2013

"Sin conocer a nadie"

Texto archivo (Elizabeth Lino Cornejo) de la presentación del libro "Oía mentar la hacienda San Agustín" realizado el martes 4 de diciembre de 2007 en el centro cultural de la Universidad Nacional Mayor de San Marcos. 

SIN CONOCER A NADIE 

"Domingo, día particularme apagado, entre amarillo y gris, pero siempre apagado. Así fue como había llegado a la hacienda, de mañana y sin conocer a nadie. Unos meses después me marcharía con los zapatos sucios y con buenos amigos, entre polvo y de tarde. Al subir a la combi vi a Deivi con unos muchachos, al mirarlo noté que llevaba algo negro."¡Caramba!", fue lo único que dije porque era mi grabadora la que tenía en sus manos. "Toma, la olvidaste, las chicas me han mandado a que te la devolviera". Alejandro Hernándes Panaifo 

Sin conocer a nadie…así fue como llegamos a San Agustín, por aquel camino de tierra, aquella vez en la línea 20 Sarita Colonia que hacía la ruta desde el parque de las leyendas hasta la antigua hacienda. Sin conocer a nadie y conociendo a medias el tema de expropiación de tierras y el proyecto de ampliación del aeropuerto. Ibamos a buscar personas que nos contaran historias, historias de aquel lugar que en algún tiempo dejaría de existir y del cual sólo la memoria podría dar cuenta. 
Comenzamos a caminar y a preguntar, fue la curiosidad y espontaneidad de los niños la que hiso que encontráramos nuestras primeras referencias “La señorita Juana sabe” “ella es la más antigua de la hacienda”, de esa forma conocimos lo que fuera en su momento de auge en aquel ingenio azucarero, la ex casa hacienda. Sus paredes derruidas y la tierra seca antecedieron al encuentro con Juana y Dora Barrantes Enríquez y en sus historias de vida comprendimos porqué era para la comunidad el referente autorizado para “contar “ la historia de la hacienda. De ellas llegaron a nuestras manos las primeras fotografías de antaño en la hacienda, supimos del padre Yonekawa, de la Hermandad de San Agustín y su fiesta patronal, de los japoneses, de los yanacones y de las consecutivas generaciones que ellas habían educado. Nos enamoramos de sus historias, de su pasión y vocación por la educación y los niños. 

Luego conocimos a las señoras del comedor popular; entre risas, anécdotas y la predisposición de entregarnos su tiempo conocimos otra parte de San Agustín, las luchas de la comunidad, el trabajo en la tierra, los problemas sociales, las historias familiares, las carencias y los sueños. Lo que se dice, lo que deja de decir, lo que se cuenta, lo que se oye en las calles, lo que hace la vida cotidiana. 
El encuentro con los niños también fue significativo, pues, a través de sus palabras vimos la capacidad de construcción y reconstrucción del imaginario popular, en sus relatos asociados con sus juegos y la realidad de su espacio de vida, para nada privilegiado. En sus voces las personas, los habitantes de la hacienda, el aeropuerto y los aviones se convirtieron en personajes. 

Los jóvenes entre sueños y desesperanzas nos relataron la dura realidad, el abandono y la falta de oportunidades al que se enfrenta y vive el joven de hoy en el Perú. Para ellos la visión romántica y juguetona de los niños sobre la acequia, el trabajo en los campos de cultivo, el aeropuerto y los aviones se transformaron en un problema al que se "tiene" que buscar una solución. El encuentro con algunos dirigentes y ex dirigentes comunales fue necesario para enfocar el problema político, el litigio de tierras, la ampliación del aeropuerto y el problema aun sin resolver “ ¿ a donde iremos? " 

San Agustin como comunidad de convivencia es un Perú en pequeñito, donde conviven los nakasone, los shimabukuro, los galves, los mercado, los bravos, los quispe y los huayhuas, un conglomerado cultural y racial de los mas variado, un resumen de nuestra realidad nacional. "Oia mentar la hacienda San Agustín" es todo aquello, y pretende llamar la atención, levantar la voz, que finalmente es la razón de ser del testimonio, sobre el desamparo de los gobiernos, sobre aquello que con pies enormes, llamado modernidad nos está despojando de espacios naturales, productivos y vitales, sin planes concretos que beneficien a las personas que lo habitan. Sí, modernidad ¿pero a costa de qué?. Sin conocer a nadie fue como llegamos a San Agustín, por la carretera Gambeta en el Callao, y hoy se han creado lazos afectivos con una comunidad que volcó su confianza, sus recuerdos, su memoria...a ellos nuestro aprecio y gratitud. 

Parte del libro "Oía mentar la hacienda san Agustín" puede leerse aquí: http://bit.ly/vwsfn0


20 de enero de 2013

La última salida del Santo en el Ayllu

Hoy  domingo 13 de enero de 2013 hay una fiesta en El Ayllu, pero no están ya todos sus pobladores, las chacras han desaparecido y son solo tierra seca, las paredes caídas de las pequeñas casas tienen la inscripción en azul que dice "MTC". Hoy toca una orquesta de salsa bajo el insoportable sol, algunos de los vecinos que ya se han mudado visitan EL Ayllu para reencontrarse por última vez en este espacio. Hoy el santo del pueblo San Agustín, acompañado de Santa Rosa han hecho un recorrido de despedida por el pueblo. Adelante iba el madero verde cargado por jóvenes mujeres, habían altares, alfombras de flores, el atajo de negritos.

2 de diciembre de 2012

"Expropiación inminente" -reportaje de Cuarto Poder

EXPROPIACIÓN INMINENTE La ampliación del aeropuerto Jorge Chávez trae consigo la expropiación de los terrenos aledaños. Conozca El Ayllu el último asentamiento humano aún bajo el vuelo de los aviones, sepa quienes viven allí, sus historias y el porqué de su negativa al traslado.
Emitido el domingo 2 de diciembre de 2012



24 de noviembre de 2012

"A punto de despegar", documental de Lorena Best

Un avance del documental "A punto de despegar" de Lorena Best Urday sobre "El Ayllu" en la ex hacienda San Agustín (Callao). Para saber más sobre el documental: http://apuntodedespegarsanagustin.blogspot.com/



Ultimatum a moradores de "El Ayllu"

Publicado en OJO 23 de nov de 2012 "Pese a la negativa de los pobladores del asentamiento humano El Ayllu de ser reubicados para iniciar obras de ampliación del aeropuerto internacional Jorge Chávez, el ministro de transportes y comunicaciones, Carlos Paredes, aseguró que deberá abandonar sí o sí sus viviendas el 30 de este mes. "No hay marcha atrás en la fecha límite. Máximo tendrán una semana", enfatizó"


Pobladores de "El Ayllu" no saben dónde vivirán

Publicado en OJO 10 de nov de 2012

Un ambiente de tensión y temor se vive en el asentamiento El Ayllu, en el Callao, que sus dos mil habitantes deberán desalojar a más tardar el 31 de este mes para facilitar la construcción de la ampliación del aeropuerto Jorge Chávez, pese a que el lugar en el que van a ser reubicados aún se encuentra completamente abandonado. 

Según pudo comprobar OJO, el terreno de nueve hectáreas en San Martín de Porres, destinado para las viviendas de los vecinos de El Ayllu, constituye un área terrosa donde todavía no hay viviendas ni camiones trabajando para construirlas y, más bien, tiene amplios montículos de basura y desmonte. 'Encima que nos obligan a dejar nuestras casas, nos tratan como cualquier cosa. Nosotros no ponemos oposición a la reubicación, pero que nos muevan a todos juntos en bloque. Si nos sacan este 31 tendremos que ir a un lugar alquilado que cueste 500 soles mensuales hasta que finalicen las obras en el terreno de Santa Rosa y eso si finalmente nos reubican', indicó, entre lágrimas, la pobladora del referido asentamiento humano, Giovana Avila. 

Los habitantes de El Ayllu denunciaron que representantes del Ministerio de Transportes y Comunicaciones (MTC) les ofrecieron casas construidas de cemento y ladrillos en el referido terreno, pero que a ultima hora les informaron que solo serían módulos prefabricados y que la construcción de los mismos tardará aún quince meses. 

Sumado a ello, los moradores afectados recibieron un comunicado del MTC, donde se les indica que así reclamen o formen sindicatos de lucha serán desalojados irrevocablemente en la fecha indicada. 'No tenemos derecho a reclamar. El pasado lunes fuimos al ministerio y quedaron en evaluar nuestros pedidos y ahora nos reparten estos volantes. ¿Es una burla?', indicó Avila mientras mostraba el comunicado. 
En tanto, autoridades del MTC puntualizaron que están brindando un bono de 7 mil 500 soles para que los moradores expropiados paguen el alquiler de un inmueble durante los 15 meses que tardará la construcción de las nuevas viviendas.


10 de noviembre de 2012

Fiesta patronal - ex hacienda San Agustín

Fiesta patronal en la ex hacienda San Agustín ( El Ayllu) -registro hallado en la web -